Un regalo para comenzar la semana
Buen día y buen comienzo de semana!!
Les cuento que un espíritu creativo de 3° "B" quiso compartir uno de sus textos. El seudónimo para firmar los escritos es GUADIXIUS 17.
Muchas gracias por compartir! Muy buen relato!
Los invito a que dejen un comentario sobre su opinión sobre esta historia.
TU MIRADA
La habitación estaba helada, el metal de los caños de la cama, potenciaron el frágil nivel de temperatura. Mi cuerpo aún conservaba algo de calor; la frazada era gruesa, pero solo cubría mis pies, y, si la forzaba un poco más, llegaba hasta mis rodillas.
Abrí los ojos. Un círculo brillante alumbra la cabecera; pero, aun así, no es suficiente. Giré hacia la derecha, vi solo el suelo; mas allá del perímetro, de la luz lunar, todo es penumbroso.
Decidí retomar mi sueño. Había un niño, de rasgos sensibles; estaba sentado en un banquito, miraba fijamente hacia el suelo. Si este, hubiese sido de madera, ya estaría consumido por una llamarada de humo negro; por suerte, no es de madera. Solo es pasto verde, tierno y acompañado de algunas parcelas de cemento.
Gotas de agua salada caían sobre unas orquídeas; una mano las ahorcaba; éstas se vengaron. Ahora los dedos están sangrando. El muchacho ignora las manchas rojas de su pantalón de algodón. En su mente repite, “solo un día más, por favor”. Se quedó pensativo unos minutos; luego, se marchó, dejando en la lápida de su padre la frazada que tenía desde nacer.
- Solo quería tener un día más pá. Ahora, con esto te quedarás.
Acto seguido el niño corrió, atravesando el cementerio. Pero se detuvo.
Había un grupo de gente velando una mujer, el agua tibia y salada, que se estaba acumulando en el círculo que rodeaba el cajón, podía llenar una botella de litro y medio. Pensó el pequeño de siete años.
- Mirá lo que hicieron tus celos papá. Por tu culpa no tengo madre, y por tu arrogancia, te perdí en la cárcel. - las lágrimas de un huérfano no pueden ser comparadas con ninguna otra.
Javi desenvuelve el envoltorio de tela blanca, sigue ahí, intacta, esperando a que le den un objetivo.
El pobrecillo huerfanito quiere volver a ver esos ojos color tormenta, volver a abrazar ese cuerpo cubierto de telas; que ocultan un cuerpo menudo, pero fuerte. Extraña la voz ronca y cortada; producto mismo del cigarro de cada hora que calmaban el hambre de una joven de veintitrés años. Este niño, extraña a su Mamá.
Un niño transitaba su séptimo año en el mundo; hasta que, un plomo a rojo vivo se cruzó con su sien. Por lo menos, eso se contaba en el diario. Fue en un callejón abandonado, cerca del cementerio local.
Desde otro punto del mundo, incalculable al uso de coordenadas geográficas. El pequeño de mirada laser, pudo decir:
- Te extrañaba Mamá.
GUADIXIUS 17

Me agarraron escalofrios al terminar de leerlo. Muy bueno!!!!
ResponderBorrarmuy bueno! me fui imaginando cada momento... no me esperaba ese final.
ResponderBorrarAdri
Me gustó mucho, como lo redacta me llama la atención y me hace imaginar toda la situación que cuenta la historia. Algo que podría agregar a esta historia sería poner más sentimientos sobre el niño para poder "identificarme" con el personaje
ResponderBorrarMe gustaria saber mas del pequeño niño, como siguió su vida y demas.
ResponderBorrarMe gusta la forma en la que esta redactado el relato, siendo muy descriptivo y logrando plasmar bien las emociones que desea transmitir
ResponderBorrar